La detección de mayor niveles de cadmio y selenio en analíticas realizadas a la población en el estudio epidemiológico desarrollado por BioGipuzkoa “no exigen” la adopción de medidas excepcionales de seguimiento, por lo que “continuar con la monitorización es suficiente para vigilar la salud en torno a la planta de Zubieta”, según ha detallado el biólogo Jesús Ibarluzea, responsable del estudio que ha cuantificado los posibles impactos en la salud y el medio ambiente de los primeros años de funcionamiento de la planta de Zubieta.

A preguntas de los grupos junteros, el experto en Salud Pública ha rebajado la importancia de esos niveles hallados, descartando su vinculación con la incineradora. De hecho, pequeñas cantidades de selenio son buenas para la salud. El cuerpo tiene que obtener este mineral en los alimentos, pero “siempre van a presentar niveles más altos quienes consumen más suplementos”, ha desvelado.

Del mismo modo, el tabaquismo es la principal razón del hallazgo de cadmio en la sangre. Son los únicos aspectos reseñables dentro del sistema de vigilancia “vivo” que, según su evolución, a futuro podría sugerir que “tengamos que estudiar más la dieta de la población, o analizar otras fuentes de contaminación”, ha aventurado el biólogo, descartando una relación de esos niveles con el complejo medioambiental.

Jon Altolaguirre (EH Bildu) ha preguntado al experto sobre un registro de casos de cáncer durante el mismo periodo de tiempo, “para que tengamos así una fotografía completa”. Ibarluzea ha respondido que un estudio epidemiológico de esas características requiere de un plazo de al menos quince años desde la puesta en marcha de la planta.

Uno de los estudios más completos

Por lo pronto, el estudio presentado es "uno de los más completos que existen en Europa", según ha remarcado el diputado de Sostenibilidad, José Ignacio Asensio. “Es necesario hablar con seriedad y rigor sobre estos temas, que son sensibles y afectan a la ciudadanía”, ha incidido.

En ese sentido, Susana García Chueca (PSE-EE) ha abogado por “dejar atrás” la alarma social. “No creo que nadie que se dedica a la política tome decisiones que perjudican a las personas. No lo creo, pero en los últimos años es un runrún que ha ido sobrevolando”, ante lo cual la juntera ha abogado por la “ciencia y la transparencia”.

En esa misma línea, el juntero jeltzale Xabier Otxoa ha destacado que este tipo de estudios permiten “desmontar los bulos y relatos falsos de los últimos años. Estos controles son necesarios para la tranquilidad de la población, porque se ha estado vendiendo miedo”.

Tras conocerse los resultados de la investigación, EH Bildu ha emitido un comunicado para señalar que la coalición soberanista continuará haciendo un “seguimiento exhaustivo” de todos los datos y análisis que se vayan realizando en torno al funcionamiento de la incineradora, “teniendo en cuenta los problemas que ha planteado”. Menciona, entre otras, filtraciones de lixiviados y vertidos de amoniaco.

El juntero Altolaguirre ha señalado que la preocupación por la intalación de la planta de Zubieta se desató por “diversos problemas” que han propiciado un "necesario" debate. “Tenemos una sociedad exigente, y si no fuera por el debate surgido no tendríamos este informe”, ha mantenido.